Chavela Vargas, Homenaje Azteca

Eugenia León, Lila Downs y Elsa Aguirre le rinden homenaje en México.

La legendaria intérprete Chavela Vargas, recibió un caluroso homenaje con mariachis, tríos, versos, bailes, proposiciones, agradecimientos y aplausos, en el Teatro de la Ciudad de México, donde se reunieron artistas como Eugenia León, Lila Downs y Elsa Aguirre, entre otros.

El público la ovacionó de pie, Vargas dio las gracias y entonó “Macorina”, entre otros temas de su creación, acompañada por los compases de dos guitarras y algunos instrumentos tocados por un solo músico.

Vargas, presenció el homenaje desde un estrado en forma de silla, mientras tocaba el turno a la actriz Elsa Aguirre, quien seguida del Mariachi 2000 interpretó temas que transportaron a los presentes a la Época de Oro del cine mexicano; “Solamente una vez” y “Motivos” fueron las canciones que la actriz le dedicó a Chavela.

Con una voz gastada y rasposa, ataviada con un largo vestido de lycra negro y azul, la cantautora Imelda Miller interpretó temas como “Franqueza”, de Consuelito Velásquez. Miller se disculpó por la ronquera: “disculpen la voz, estoy un poco ronca, pues me acaban de soltar del hospital”.

Sin dudas, Lila Downs fue de las más ovacionadas de la noche; sin embargo, las lágrimas no se hicieron esperar cuando Chavela interrumpió a Lila para hablar: “Yo me voy, pero atrás de mi viene una gran voz, ella es Lila Downs”. Juntas cantaron un tema de Oaxaca, “La Sandunga”, entonces Downs abrazó fuerte a Chavela, mientras hacía los coros.

La cantante Eugenia León fue otra de las figuras destacadas que se llevó varios aplausos, mientras sostenía largo tiempo las notas de las canciones.

Finalmente, la Secretaria de Cultura del Distrito Federal, Raquel Sosa Elízaga, le entregó a un reconocimiento especial a Vargas, quien lo recibió y agradeció por esa velada tan especial.

Semanas atrás, la legendaria cantante aseguró que su longevidad se debe a los 40 mil litros de tequila consumidos, y aunque ahora ya no toma, rememoró sus incursiones en compañía del compositor José Alfredo Jiménez por tabernas y bares en México. “Bebíamos de la mañana a la noche y José Alfredo escribía sus canciones en todas partes, en el piso, en las mesas o en las servilletas”, expresó Chavela Vargas a sus 87 años de edad, y además destacó que no le tema a la muerte, más bien la imagina como un paso a otra dimensión: “Lo veo como algo hermoso”, afirmó.

La carrera de Vargas tuvo su apogeo a mediado de los cincuenta cuando era conocida por sus borracheras y locuras que siempre terminaban siendo noticia. Pero el alcohol pasó a ocupar la parte mas importante del día para ella y su carrera se fue desplomando, tal es así que muchos la daban por muerta. Así, permaneció mas de 20 años en el anonimato, durmiendo en la casa de la que alguna vez fue su empleada y donde, según sus propias cuentas, bebió cuarenta y cinco mil litros de tequila.

En 1990 Chavela Vargas despertó de aquel gran letargo artístico y a los 71 volvió lentamente al ambiente musical tocando para pocos. Finalmente, resucita su carrera y vuelve con éxito a los escenarios en el 2004, con un emotivo concierto en el teatro Carnegie Hall, de New York, donde se consagra para la eternidad como una verdadera leyenda viviente.